Uruguay

Si bien el Uruguay es un país pequeño comparado con otras naciones sudamericanas, es un destino más que interesante de observación de aves. El país se encuentra en una zona de transición entre hábitats chaqueños, las Pampas y los Cerrados brasileños. Ambientes como sierras, quebradas, vastos humedales, pastizales, palmares, bosques nativos y un extenso litoral a lo largo del Atlántico Sur son el hogar de unas 430 especies de aves.

La gran Laguna de Castillos, la Laguna Negra y vastos humedales cercanos rodeados por praderas, palmares y bosques son una de las mejores regiones del país para observar aves, no muy lejos del litoral marino. Especies como el ñandú, el inambú chico, el chajá, los teros reales, el gavilán caracolero, el aguilucho langostero, el churrinche, el cardenal de copete rojo y el federal, junto con la monjita dominicana y el amenazado tordo amarillo son algunas de las aves que habitan los Humedales del Este.

Uruguay es también un país de sierras atravesadas por ríos y torrentes y cubiertas por densos bosques y algunas sabanas, habitados por chuñas de patas rojas, tingazúes, carpinteros blancos, águilas moras y por el amenazado cardenal amarillo. Muchas estancias y establecimientos rurales que brindan alojamiento y protegen la vegetación nativa son los lugares inmejorables para pernoctar y hacer base para salidas de observación.

Los visitantes a Colonia del Sacramento que vengan desde Argentina también encontrarán una gran diversidad de aves en los bosques nativos de los alrededores, el los juncales costeros y en los campos de la región. Lechucitas de las vizcacheras, cotorras comunes, ñandúes, gavilanes planeadores, caranchos, halcones blancos, carpinteros reales, chincheros, reinas moras y cardenillas figuran entre las aves más conspicuas de esta encantadora comarca.